Cara Norte: Via Pons-Solís

Después de la ascensión efectuada el 4 abril de 2004, con nieve abundanta, teníamos ganas de volver a la Torre Cordier en verano, para ver más de cerca su aspecto. Yo, además, tenía ganes de subir por la cara norte, que és la más espectacular, y la que se ve desde muchos sitios al norte del Mazizo de la Maladeta. El 30 de julio de 2004, salimos Tòfol, Ignasi, Ramon y yo, Jordi, hacia Benasque, con la intención de hacer muchas fotografías, y ampliar datos respecto a este peculiar pico. Con buena previsión meteorológica, tenemos la intención de vivaquear en una cota elevada, para así poder trabajar el máximo de tiempo posible, este sector de la Maladeta.

Cogemos el autobús que nos deja en la Besurta (1.900m), y per el camino ya miramos hacia arriba para identificar la Torre. Un vez llegamos, retrocedemos unos metros la pista, hasta un barranco desde dónde la Torre és bién visible. Nos volvemos y subimos en dirección Norte hasta la Renclusa (2.122m), dónde hacemos una breve parada para volver a mirar la Torre, que se vuelve a ver perfectamente. Seguimos subiendo en dirección Oeste hacia el Valle de Paderna, y hacemos otra parada en el Ibón de Paderna (2.240m), desde dónde vemos la Torre espectacularmente reflejada en el lago. Giramos directamente hacia el Norte, siguiendo algunos mojones que van en dirección al sector occidental de la Maladeta, por un sendero nada marcado, subiendo por una zona dónde se mezclan constantmente las rocas con prados alpinos y vegetación baja, pasando entre el barranco de la Maladeta y el barranco del Dién. Llegando a la cota 2.520m, Tòfol identifica un curso de agua, que denomina fuente Oh Déus en sus notas de campo anteriores, y que és un buén sitio para hacer vivac. A partir de aquí ya desaparece la vegetación, y posiblemente también el aigua superficial. Tenemos rincones llanos y resguardados dónde dormir, y además, tenemos una buena vista de la Torre Cordier, justo delante nuestro, en dirección Norte-NorOeste.

Dejamos material para aligerar las mochilas, y seguimos subiendo hacia la Torre. Ahora ya no seguimos ningún mojón, y vamos hacia el Norte, avanzando por bloques grandes y pequeños, siguiendo la morrena lateral del barranco del Dién. Llegando a la cota 2.850m, nos separamos. Tòfol y Ignasi, irán a buscar el cuello que separa el Pico Cordier de la Torre Cordier, per subir por la cara Sur, mientras Ramon y yo, vamos hacia el Oeste, a buscar la base de la Torre Cordier, para escalarla por su cara Norte.
Antes de acercarnos, analizamos con detalle las posibles vias de ascensión. Se ven claramente dos tramos bién diferenciados, ya que la cima por esta cara tiene un plató intermedio. En el primer tramo vemos una corta diagonal ascendente, que va en dirección Oeste a buscar una chimenea que conduce prácticamente al plató intermedio. El segundo tramo nos queda una poco más alejado, y no lo podemos examinar con tanta claridad, pero la arista Norte parece factible.

Vamos decididos hacia la base de la Torre, cruzando el barranco del Dién que aún tiene un poco de nieve, y buscamos la diagonal que veíamos de lejos. Para llegar a su Inici ya debemos hacer alguna trepada, con algún paso de 3 grado, y nos percatamos de que la roca está muy rota y sucia. Subimos por la diagonal, con una gran roca lisa a nuestra izquierda, y sin problemas llegamos a la base de la chimenea que víamos anteriormente. Más a su izquierda, también se ve un buén paso, aúnque no nos dejaría tan altos. subimos por la chimenea, que tiene algún paso de 3 grado, y llegando a la mitad hace una pequeña terraza dónde se puede descansar. A partir de aquí se pone muy vertical, y hay que tirar fuerte de brazos, pero Ramon me comenta que no se encuentra muy bién. Intento subir un poco más a la izquierda de la chimenea, hago unos pasos, pero llego a un punto en el que no tengo ninguna presa buena dónde cogerme. Estoy delante de una gran roca, que me llega a la altura de los ojos, que forma un pequeño desplome, y por encima está un poco inclinada hacia mi, y llena de piedras y tierra dónde és imposible agarrarse. Deshago unos pasos, y me reencuentro con Ramon. Le comento la situación, y decidimos bajar el primer tramo de la chimenea, para buscar otra opción mejor.
Intentamos el paso que hay justo a la izquierda de la chimenea, y despuès de avanzar unos metros, me encuentro en una situación idèntica a la de antes. Vuelvo a deshacer unos pasos, y ahora intento subir más a la izquierda, por unos pasos bastante aéreos, pero con buenos agarres dónde cogerse. Son passos de 3 grado bastante aéreos, que nos llevan a una pequeña repisa. A la derecha sigue un pequeño diedro, que superamos con algún paso de 4 grado, y enlazamos con una zona descompuesta, una pequeña pedrera que nos deja en el plató intermedio.
Su aspecto nos sorprende, ya que está lleno de enormes bloques graníticos, que forman una pequeña cubeta que aún contiene nieve. Los blocques son más grandes que los del espolón del puerto, y están muy mal colocados. Ramon cada vez se encuentra peor, y acaba vomitanto todo lo que había comido y bebido. Se queda bién blanco, pero me comenta que se siente un poco mejor, aúnque con dolor de cabeza. Le propongo bajar por una ruta más fácil, hacia el barranco del Dién, para enlazar con el itinerario que realizan Tòfol y Ignasi, pero me dice que si yo sigo abriendo la vía, el continua. Nos miramos el panorama que tenemos delante nuestro, y solo se ve una opción posible. Practicamente todo és roca rota y sucia, que en cualquier momente se puede venir hacia abajo, i además con desplomes constantes. Vamos hacia el Oeste para buscar el filo de la arista Norte que és de roca més oscura. A su derecha hay una pared lisa que cae espectacularmente hacia el barranco al Oeste de la Torre. Subimos fácilmente los primeros metros, con alguna trepada, pasamos por unas rocas grandes estrañamente inclinades, y cogemos un pequeño diedro a nuestra derecha, que superemos con algún paso de 4 grado. La cima parece cerca, pero aún queda un poco. Nos volvemos a encontrar con grandes bloques  de roca que superamos con la técnica de adheréncia, y hacemos algún tramo un poco aéreo, con pasos de 3 grado, por la vertiente Oeste de la cresta, hasta llegar a los últimos grandes bloques que superamos fácilmente.

Analizandolo, veo claramente que no és un tres-mil principal, pero si un cima secundaria asequible para mucha gente por su cara Sur. És un buén mirador de la vertiente Norte del sector occidental de la Maladeta, y se debe incluir su cota y ubicación en los mapas. También se debe diferenciar claramente el Espolón Cordier, que desde el Pico Cordier baja suavemente en dirección NorEste, del Cuello de la Torre, que en dirección Norte enlaza con la Torre Cordier, y por dónde el Pic Cordier pierde altura rápidamente.

La escalada de la cara Norte de la Torre Cordier no tiene gran dificultad. Mayoritariamente son pasos de 3 grado, con algún paso de 4 grado, pero hay que destacar su peligrosidad, por el hecho de ser un caos de rocas muy rotas, dónde és fácil tirar grandes bloques montaña abajo, sobretodo en su primer tramo. És recomendable no ir más de dos personas juntas, y sobretodo, asegurarse que no haya nadie per debajo.

Jordi Pons Corbella, julio de 2004.